Según el informe de Jin10 del 10 de julio, el presidente de EE. UU., Donald Trump, anunció un arancel del 50% a Brasil.

El presidente brasileño Lula emitió una declaración en respuesta a la afirmación de que "existe un déficit en el comercio entre Estados Unidos y Brasil", calificándola como pura desinformación. Las estadísticas oficiales de Estados Unidos muestran que, en los últimos 15 años, Estados Unidos ha acumulado un superávit de 410,000 millones de dólares en el comercio de bienes y servicios con Brasil. En vista de esto, cualquier medida unilateral de aumento de aranceles será respondida de manera recíproca de acuerdo con la Ley de Comercio Recíproco de Brasil. Lula enfatizó que la soberanía nacional, el respeto mutuo y la firme defensa de los intereses del pueblo brasileño son siempre los principios rectores de Brasil en el manejo de las relaciones internacionales.